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Ecología
Dolor en los cayos

"Aquí hay que tirar piedras y no mirar para adelante". La construcción del pedraplén a Cayo Coco y la destrucción ecológica.
por EUDEL CEPERO, AAEC Parte 2 / 3

Algo similar pasó con los manglares. De las aproximadamente 10 000 hectáreas sólo el 47 por ciento sobrevivió, mientras que el 95 por ciento del mangle rojo murió, al tiempo que se reducía en más de un 60 por ciento las zonas propicias para el habitad del flamenco y la corúa.

La Magnitud del desastre obligó a la publicación de algunas referencias en la prensa y a la confirmación oficial por parte de la Ministra de Medio Ambiente, Rosa Elena Simeón: "Nunca negamos el impacto del pedraplén, como tampoco afirmamos que alguien vaya a morir sano". Además, se comenzó a tratar de paliar la situación poniendo alcantarillas que los peces no cruzan, según constataron más tarde, así como construyendo puentes que no logran el intercambio de aguas necesario y han trastocado el sistema natural de corrientes marinas.

Con el pedraplén llegó la colonización turística a los cayos, para completar la estrategia de generar divisas con rapidez y lograr el milagro de la recuperación económica a costa del patrimonio natural de la nación.

La destrucción se lleva a cabo a pesar de que el Gobierno conoce las recomendaciones hechas para manejar la cayería norte por un grupo de especialistas cubanos bajo la asesoría del consultante de la ONU James Dobbin, a saber: la altura de las edificaciones no sobrepasará las dos plantas, no se podrán realizar movimientos de tierra que modifiquen el relieve, no se permitirá el relleno de lagunas o la construcción sobre el manglar, sólo será talada la vegetación estrictamente necesaria, etc.

Una valoración ambiental de los proyectos construidos en el sub-archipiélago confirma que se obvió la opinión del señor Dobbin: desbroce indiscriminado de la vegetación, empleo excesivo de movimientos de tierra, terraceo, terraplenado y rellenos, insistencia en la destrucción de lagunas costeras y primera línea de playas, tipología urbana de las construcciones contemplado estructuras grandes y pesadas no acordes con zonas costeras, etc.

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