| Rhode Island: Fifo a la carta |
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| De cómo la posmodernidad ha convertido el 'Comandante ordene' en el 'Comandante ordenado'. |
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| por EMILIO ICHIKAWA MORIN |
Parte 2 / 2 |
Otro plato interesante es el Bahía de Cochinos (el Playa Girón, digamos), que en la carta aparece como Bay of Pigs; paradójicamente, este exótico plato no lleva cerdo: "Chicken or Beef Empanada. Black Beans & Rice". En la Nueva Inglaterra, el gustador cubano tampoco tendrá que echar de menos algunos de sus manjares favoritos: el dulce de guayaba, el buchito de café fuerte, el pan de flauta. Son los milagros de un "internacionalismo" que ha devenido "globalización" permutando los oscuros objetos de la ideología por los sabrosos platos de la gastronomía. Lo frívolo esencial ha desplazado a la erudición guerrillera. No hay lucha entre la civilización y la barbarie, sino entre el picadillo de soya y el filete mignon; entre la tilapia y el salmón marinado.
En una esquina del menú se asegura que la pasta de guayaba y las empanadas son frescas, que se elaboran cada día. Con el riesgo de lo políticamente correcto se envía, además, un mensaje conciliador cuando se ofrece, en calidad de "House Specialty", el conocido arroz congris; o sea, los "Moros y Cristianos", que se traduce como "Moors and Christians".
En una brillante mesa de ese encuentro en Brown University, escritores como Héctor Aguilar Camin y Carlos Fuentes aseguraron que la literatura latinoamericana actual, que respecto al "boom" es una suerte de boomerang (alejamiento y aproximación), encara una época de franco debilitamiento ideológico donde el escritor no tiene necesariamente que fungir como intelectual ni obsesionarse por lo que se ha llamado "responsabilidad social". No es un fenómeno que concierne sólo a Latinoamérica, también es perceptible en los Estados Unidos. El suplemento cultural Babelia, del diario El País (sábado 20 de abril, 2002), publicó una entrevista al escritor norteamericano Richard Ford donde reafirma para este contexto: "Los escritores carecen de responsabilidad histórica".
Y puede que los políticos también, al menos desde el punto de vista del artista; por eso en el Cuban Revolution hay sendos cuadros de Marilyn y Fidel, al óleo sobre madera, donde éste aparece como aprisionado por un pedazo de cerca del CAN cubano (Combinado Avícola Nacional). He aquí la interpretación post-ideológica de la imagen: no es que Fifo esté encerrado, no, nada de eso: es que parece un pollito amarillito.
La post-ideologización de la literatura, igual que la despolitización de la imagen de la Revolución Cubana y su inserción en ámbitos lúdicos del capitalismo contemporáneo es, sin embargo, un fenómeno también relativo. En las esquinas inferiores de la carta del Cuban Revolution de Providence se infiltran, discretamente, dos mensajes intencionales que aspiran al tradicional "prestigio" de los "hechos":
—Fact 1: "July 26, 1953: Fidel Castro and a group of revolutionaries storm Moncada barracks in Santiago de Cuba. They were defeated and jailed. Castro's forces claimed victory when Cuban Dictator Fulgencio Batista fled on Jan 1, 1959".
—Fact 2: "JFK authorized the US trade embargo against Cuba in 1961. It remains force today".
La situación, como se comprenderá, es muy dispareja. Mientras en una película las vitrinas están llenas, en la otra las barrigas permanecen vacías.
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