| Hasta fuera |
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| César Pedroso, la timba y Los que Son, Son. |
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| por CARLOS OLIVARES BARó, México D. F. |
Parte 1 / 2 |
Muchas de las piezas impuestas por Los Van-Van en los salones de baile, presentes en la memoria colectiva durante más de 30 años de trayectoria, son composiciones y arreglos de su pianista fundador César Pupy Pedroso (Seis semanas, Será que se acabó, Eso está bueno, Fallaste al sacar tu cuenta, Después que te casaste, El buena gente, Calla, calla, Disco Azúcar ,Temba, tumba y timba...). El colorido del songo timbero de Los Van-Van le debe mucho a los pasajes cadenciosos del piano del "sandunguero de Pogolotti, hijo de Nené", que supo proyectar un estilo de sabrosa sucesión rítmica en los mambos/montunos de la mítica agrupación de Formell (escúchense los solos de piano en Seis semanas y Por encima del nivel).
Ningún bailador puede contenerse frente a la presencia de la síncopa sonera/funk del bajo de Formell, el drums rumbero/rock de Changuito/Samuel Formell y las alternativas acentuadas de los violines de Gerardo Miró y Jesús Linares en determinante y precisa consonancia con la digitación montunera —marcada con guiños armónicos de bomba, plena, ranchera (Será que se acabó) y Calypso— de Cesar Pedroso: "fórmula" responsable de haber puesto a bailar a varias generaciones en la Isla y en muchas partes del mundo.
En 1995 apareció Lo mejor de Cesar Pedroso/Hits of Los Van-Van (Qbadisc), donde un grupo de cantantes (Rojitas, Isaac Delgado, Ángel Bonne, Caridad Cuervo, Rolo Martínez, Raúl Planas, Omara Portuondo, Mayito Rivera, Pedro Calvo y Xiomara Laugart) e instrumentistas (Elpidio Chappotín, Hugo Morejón, Jorge Reyes Lazaga, Samuel Formell, Pancho Amat, Roberto García...) daban forma a una suerte de "Orquesta Todos Estrellas" y recreaban algunos de los éxitos de Los Van-Van firmados por el pianista del barrio de Pogolotti: Omara Portuondo fraseaba Disco Azúcar con vigorosos apuntes soneros, Caridad Cuervo pregonaba, con sabor oriental, Fallaste al sacar tu cuenta, y el magisterio de Raúl Planas sobresalía en Después que te casaste, mientras el "alambre dulce" de Pancho Amat "niñeaba" y hacía de las suyas en Calla, calla, desde un diálogo abierto con el trombón de Morejón y la trompeta de Roberto García. Piezas que conocíamos en los cordeles sonoros de orquestaciones charangueras a lo Van-Van, pero que, bajo la acertada dirección musical del mismo Pedroso, se apreciaban en un timbre de conjunto a lo Chappotín y ciertos aires de Rumbavana.
Después de 31 años como pianista y arreglista de Los Van-Van, el compositor de El negro está cocinando ha decidido formar su propia agrupación, y acaba de aparecer en el mercado Cesar Pedroso/Pupy, y Los que Son, Son (Pimienta Records, 2002) que viene a subrayar "el fenómeno musical cubano más importante de fines de siglo" (Acosta): la timba. Le acompañan en esta aventura algunos "vanvaneros" de pura cepa (el percusionista Changuito, los violinistas Miró y Fajardo, el vocalista y sax Ángel Bonne y el tecladista Boris Luna) y otros músicos de primera fila (el trombón Hugo Sánchez, los trompetas Julio Padrón y Basilio Márquez y los percusionistas José Panga López y Julio Perchero Zaldivar).
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