Guantánamo: Prisioneros en huelga de hambre |
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AFP/ Washington. Poco menos de un centenar de los 300 presos transferidos desde Afganistán a la base estadounidense de Guantánamo seguían en huelga de hambre este jueves declarada luego de un incidente por el uso de un turbante y la incertidumbre general por su futuro.
En la noche del jueves, 88 prisioneros rechazaron su plato de comida, que contenía arroz, además de pan, leche y manzanas, indicó el sargento Bryan Beach. Al mediodía, 194 prisioneros de los 300 se habían negado a comer.
Cantando rítmicamente, los prisioneros apoyaron durante tres cuartos de hora este jueves sus colchones, sábanas, mantas y efectos personales contra la alambrada de su pequeña celda individual de 6 m2.
"Por precaución, jeeps Humvee tomaron posición alrededor del campo, pero no hubo enfrentamientos" entre guardias y prisioneros, señaló el comandante Steve Cox.
Los sombreros están prohibidos por temor a que oculten armas. El prisionero ignoró la orden de un guardia, incluso después de la traducción por un intérprete y el guardia entró en la celda para quitarle el turbante.
Se comprobó después del episodio que el detenido no había respondido porque estaba orando, lo que implica silencio y concentración según el Islam, agregó el oficial.
No obstante, según él, "las verdaderas razones provienen de la tensión subyacente vinculada con su incierto futuro". "No saben qué va a pasar con ellos ni cuándo", dijo.
El Pentágono, en efecto, no decidió todavía quiénes de los 300 detenidos serán juzgados por tribunales militares, enviados a sus países, liberados o mantenidos en Guantánamo. Otros doscientos permanecen detenidos en Guantánamo.
Los presuntos miembros de la red de Osama bin Laden o talibanes fueron trasladados por Estados Unidos desde Afganistán a Guantánamo, donde están confinados en jaulas al aire libre en el denominado Campo rayos X. Cerca de otros 200 prisioneros están siendo interrogados en Afganistán.
Los prisioneros pertenecen a "al menos 31 países distintos", según el Pentágono, que no los identificó. Visten un conjunto anaranjado, y no tienen derecho a reunirse, aunque pueden hablar a través del tejido con los ocupantes de las jaulas contiguas.
Los detenidos, que están aislados del mundo exterior, no pudieron obviamente dar a conocer sus demandas a la prensa.
Las autoridades estadounidenses limitan sus contactos a los delegados del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y a un imán originario de Bangladesh que oficia como religioso militar estadounidense.
Los periodistas no pueden hablar con ellos, y los fotógrafos y camarógrafos tienen orden de no tomar primeros planos que permitan reconocer a los detenidos.
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