| El régimen fustigará la globalización en Cumbre de Lima |
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AFP/ Castro sumará su voz a la denuncia del terrorismo durante la Cumbre Iberoamericana en Lima, pero defenderá su modelo estatista al discutir un documento previsto sobre la actual situación económica mundial, según analistas oficiales.
A diferencia de lo sucedido en la Cumbre del año pasado en Panamá, cuando Castro rehusó suscribir una condena al terrorismo que señalaba en particular a la banda separatista vasca ETA, la polémica este año se centrará en el tema económico, aseguraron los analistas, cercanos al Partido Comunista.
Según la agenda de la XI Cumbre a realizarse el 23 y 24 de este mes en Lima, los participantes debatirán tres documentos: la llamada Declaración de Lima —texto formal que se firma al concluir la cumbre—, otro para fijar una posición común contra el terrorismo, y un tercero sobre comercio y situación económica mundial.
Fidel Castro condenó los atentados del 11 de septiembre en Nueva York y Washington, y su Gobierno ratificó el pasado jueves 15 la totalidad de los Tratados Antiterroristas radicados en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pero reivindicó el papel de ésta para conducir esa lucha, y criticó la ofensiva militar desencadenada por Estados Unidos contra los talibán para capturar al fundamentalista islámico Osama Bin Laden y desmantelar su red Al Qaida, considerada responsable de los atentados.
En un discurso transmitido por radio y televisión a inicios de noviembre, Castro calificó de monumental error los bombardeos a Afganistán y aseguró que "ninguno de los grandes problemas del mundo se pueden resolver por la fuerza".
En Panamá, la polémica se originó porque Castro consideró que una condena al terrorismo debía ser integral y no "selectiva" contra un solo grupo, en ese caso ETA. Un documento de repudio a toda forma de terrorismo, como el que está previsto suscribir en Lima, no tendría ahora la oposición de La Habana, dijeron los analistas, sin indicar cuál sería la posición castrista si se planteara una moción de apoyo a la coalición antiterrorista liderada por Estados Unidos.
El presidente de Gobierno español, José María Aznar, anunció ya su intención de reclamar "el compromiso iberoamericano en todo aquello que signifique la lucha contra el terror" y el primer ministro de Portugal, Antonio Guterres, señaló que "no expresar solidaridad con una coalición antiterrorista en este momento no tiene ningún sentido".
Según los analistas, el Gobierno cubano considera con recelo cómo se evaluará en la reunión de mandatarios la actual coyuntura de la economía mundial.
Aznar exhortó a la Cumbre a "dar un claro mensaje económico", que enfatice la necesidad de abrir mercados y acelerar la liberalización.
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