AFP/ Bridgetown. Barbados. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) continúa preocupada por las secuelas del fugaz Golpe de Estado ocurrido en abril pasado en Venezuela, así como por la situación de los derechos humanos en Cuba, Haití y Colombia, dijo este martes el presidente de ese panel, Juan Méndez, en un informe ante la Asamblea General de la OEA en Barbados.

Cuba: "Condenamos la inexistencia de libertad de expresión y asociación y de participación política en Cuba. Abrigamos esperanzas de que la visita reciente del ex presidente Carter produzca aperturas que permitan un diálogo franco sobre estos temas", dijo Méndez.

Venezuela: "Lamentamos la escasa voluntad de diálogo que exhiben diversos actores políticos en la crisis de Venezuela. Exhortamos al gobierno a abrir aún más la estructura, la agenda, el formato y la composición de las mesas de diálogo. Es imprescindible avanzar en la independencia e imparcialidad de la justicia y de los poderes creados para ejercer control sobre el Ejecutivo".

"No vemos todavía muestras de que haya voluntad de investigar imparcialmente los hechos de violencia del 11 al 14 de abril, para que el espectro de la impunidad no contribuya a mellar aun más la confianza en las instituciones, ni haga por ello todavía más difícil el diálogo".

Méndez recordó la reciente visita que hizo la CIDH a Venezuela, agradeció la cooperación que recibieron de las autoridades y la invitación que se les hizo para volver "con la frecuencia que consideremos necesaria" y anunció que efectivamente están planeando nuevas visitas próximamente.

Agregó que tanto en Venezuela como en Haití, "es urgente evitar un ulterior deterioro del ya precario Estado de Derecho", para lo cual sugirió que deberían aplicarse los mecanismos de la recién aprobada Carta Democrática Interamericana.

Haití: "Es urgente que el gobierno del presidente Jean Bertrand Aristide se aboque a una reforma profunda del Poder Judicial y proceda a un desarme para reestablecer el orden y la seguridad ciudadanas", dijo Méndez.

Colombia: Ante la elección de un nuevo gobierno, la CIDH "reitera la necesidad de romper el círculo vicioso de la impunidad para los crímenes de derechos humanos". "Especialmente es importante encarar decididamente la lucha contra el paramilitarismo y la ruptura de sus vínculos con algunos agentes del Estado", agregó Méndez.

"Ello no sólo es incompatible con la obligación, el derecho y la voluntad expresada por el gobierno y la sociedad colombianas de erradicar la rebelión armada; es además condición jurídica y de eficacia de esa lucha", recalcó.

Como en todos sus informes regulares, "la CIDH condena con energía las violaciones al derecho internacional humanitario cometidas por los grupos alzados en armas", concluyó el presidente de la CIDH.

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