| El verdadero rostro de Chávez |
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| Tras la huelga del pasado 10 de diciembre el presidente venezolano asegura que su revolución está armada. |
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| por MIGUEL RIVERO |
Parte 1 / 2 |
Después del éxito del paro cívico del pasado 10 de diciembre, que según casi todos los medios de comunicación detuvo prácticamente el país, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, colérico, ha mostrado su verdadero rostro: el de un militar cuartelario dispuesto a amenazar a la población con el uso de la fuerza y de la represión.
El jefe del Gobierno se declaró ese día "más revolucionario que presidente", en un acto castrense para celebrar el Día de la Fuerza Aérea en el cual, junto a los F-16 norteamericanos, fueron exhibidos los Migs-29 de fabricación rusa.
Como sucede en estos casos, Chávez aseguró que "los cañones son propiedad del comandante y la revolución está armada de verdad".
O sea, el presidente cuenta con que el ejército, que ha recibido múltiples prebendas, sea fiel "al proceso revolucionario bolivariano", no a la Constitución. ¿Quién representa la revolución? Ni más ni menos que el propio Chávez, que ya anunció su propósito de permanecer en el poder hasta el año 2021. Si lo dejan llegar a esa fecha se convertiría en mandatario vitalicio, porque tiene un ejemplo cercano en su mentor, Fidel Castro.
Lo cierto es que la adhesión a la huelga general del pasado 10 de diciembre fue superior a las expectativas de la Federación de Cámaras de Venezuela (Fedecámaras), que convocó el paro.
Se ha tratado de presentar como un movimiento de la oligarquía y de los empresarios, pero lo cierto es que al paro se unieron los sindicatos y los colegios profesionales. Fue el inicio de un proceso de desobediencia civil, que puede continuar en el futuro.
El economista Luis Vicente León, director de la firma consultora Datanálisis, declaró después de la protesta cívica: "la reacción del presidente ha sido muy agresiva, como si no esperara un respaldo tan amplio al paro, y sus allegados no han sabido explicarle bien el alcance del mismo".
Con muy poca originalidad, Chávez denunció que existe "una conspiración internacional" para derribarlo, en conexión con venezolanos que abandonaron el país, a los cuales calificó de "escoria".
En realidad, uno de los factores que puede beneficiar al megalómano presidente venezolano es que en los últimos dos años han emigrado más de 200 000 personas de Venezuela. Si los opositores se marchan, dejan el camino libre para la consolidación de un régimen autoritario, como ya sucedió en Cuba. Esperemos que eso no suceda.
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