| Empezar por casa |
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| Tras el 11 de septiembre neoyorquino se impone una pregunta: ¿además del islámico, el Occidente democrático combatirá toda clase de terrorismos? |
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| por MANUEL VáZQUEZ PORTAL |
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¿De qué terror huye despavorido el cubano? ¿Qué peligro le amenaza? ¿Qué horror le acecha? ¿Cómo es capaz de introducirse en el tren de aterrizaje de un avión que parte del país? ¿Cómo se arriesga sobre una rústica balsa para atravesar el Estrecho de la Florida? ¿Por qué se casa con seres desconocidos, sin amarlos, para alejarse de su terruño? ¿A qué se deben las "deserciones" de funcionarios, artistas, atletas, apenas pisan tierra ajena? ¿Por qué esas filas enormes frente a las sedes diplomáticas que conceden visa en La Habana?
Entiendo que los afganos huyan de la pobreza, la sequía y la guerra. Se cierne sobre Afganistán el hambre y la muerte. Años de batallas y miserias han propiciado el incontenible, masivo éxodo. Van hacia todas las fronteras. Pareciera que nada tienen que defender en tierra propia y parten desesperados a defender lo único que les queda, sus pobres vidas, en tierra extraña.
Pero, ¿de qué terror huye despavorido el cubano? ¿Lo atenaza el hambre, lo amenaza la guerra, le asustan las enfermedades? ¿Qué le hace lanzarse en estampida desbordando Camarioca, inundando el Mariel, plagando Guantánamo? ¿Qué hace que niños y mujeres se embarquen en rústicos y frágiles navíos? ¿Cómo no ha cesado el éxodo a lo largo de 42 años?
¿Terrorismo es sólo el que conmueve en plena noche a Badalona, cuando un coche-bomba impacta contra un edificio? ¿El de unos fanáticos suicidas que convierten aviones comerciales en cargas mortíferas? ¿El de una banda de narcotraficantes que ametralla un poblado en las montañas colombianas? ¿O existe más de un tipo de terrorismo? ¿Cómo se llama mantener a un pueblo sin derecho a manifestarse, asociarse, expresarse? ¿Cómo se llama mantener a un pueblo sin derecho a la propiedad, a la educación libre y electiva, a la posibilidad de entrar y salir de su país cuando le plazca? ¿Cómo se llama impedirle cambiar de casa o de auto o adquirirlos, cómo se llama negarle el derecho a opinar sobre el Gobierno o sus representantes so pena de procesamiento, cómo se llama la prohibición de espacios públicos en los que el pueblo pueda oponerse al eterno e inamovible Partido en el Poder, cómo se llama, en fin, la permanente vigilancia de cuerpos militares y civiles, de organizaciones políticas y sociales sobre el ciudadano de a pie?
Yo no sé cómo se llama. Pero sé que existe más de un tipo de terrorismo, y en la actual coyuntura mundial, luego del 11 de septiembre, cuando todo el planeta vio conmovido y perplejo la atrocidad perpetrada sobre el World Trade Center, no creo que pueda admitirse ninguna variante de esa aberración humana.
Luchar contra el terrorismo, en cualquiera de sus manifestaciones, es tarea indeclinable de todos los hombres de buena voluntad en el presente siglo. Debiéramos entregarle a nuestros sucesores un mundo libre de extremismos religiosos, políticos y económicos. Y lo primero es empezar por casa.
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