| Oswaldo Payá refuta las declaraciones de Castro |
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AFP/ La Habana. El disidente cubano Oswaldo Payá denunció el domingo que a pesar del reconocimiento hecho por Fidel Castro ante la cadena norteamericana ABC del derecho ciudadano a presentar el Proyecto Varela, sus promotores han sufrido hostigamiento y persecuciones.
"Mientras colectábamos las firmas para esta gestión legal han ignorado peticiones y denuncias formales de ciudadanos, han hostigado, perseguido, calumniado, amenazado y hasta golpeado" a los promotores, dijo Payá en un comunicado escrito.
La televisión cubana transmitió de forma íntegra, la entrevista que le realizara durante dos horas y media la periodista Barbara Walters de la cadena ABC, difundida el pasado viernes en Estados Unidos.
Sobre el derecho de los promotores a presentar el Proyecto Varela al Parlamento, Castro respondió "lo tienen, y cualquiera que la presente con todos los requisitos, recibirá una respuesta".
Castro, añadió que "la decisión sobre eso corresponde a la Asamblea Nacional. La Asamblea Nacional se guía por preceptos legales y respeta los derechos ciudadanos de cualquier petición, cubriendo todos los trámites pertinentes".
El Proyecto Varela, presentado en mayo al Parlamento con un aval de 11.020 firmas, solicita la realización de un referendo para introducir una nueva ley electoral y cambios a favor de la libertad de prensa, palabra, asociación y empresa, así como una amnistía para los presos políticos. La Asamblea Nacional no ha respondido a la petición.
Payá estimó que la "represión terrorista se ha incrementado, ya que seguimos colectando firmas, pero se añaden las amenazas y otras represalias de la Seguridad del Estado a ciudadanos que presentamos la petición el 10 de mayo".
Castro dijo a la ABC que "la Asamblea Nacional es una institución seria, me imagino que esté dando todos los pasos pertinentes porque todo eso va a comisiones, como en Estados Unidos, y lo discuten, lo analizan y no hacen trampas. Ellos tendrán que decidir si lo llevan a la Asamblea o no". Aseguró que "no habrá ninguna ilegalidad ni ninguna trampa".
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