AFP/ La Habana. Fidel Castro dio a conocer este lunes que unos 90.000 antiguos trabajadores del sector azucarero, afectados por el cierre de centrales en toda la Isla, "serán integrados en nuevas escuelas en las próximas semanas".

Los trabajadores-estudiantes continuarán recibiendo sus salarios "creándose así, por primera vez en la historia, el empleo de estudiante" en Cuba, dijo Castro y aseguró que esto permitirá a los obreros "aumentar sus conocimientos y su autoestima, haciéndolos más útiles para la patria".

El máximo representante del régimen inauguró este lunes el curso lectivo. En un acto en la Plaza de la Revolución, hizo un balance de los "esfuerzos" dedicados por el país a la educación. Según afirmó, La Habana destinó este año "el 11,4% de su Producto Interno Bruto a la enseñanza", una cifra que está "muy por encima de cualquier otro país de América Latina".

En un discurso leído de 45 minutos, y vistiendo su tradicional uniforme verde olivo, Castro leyó estadísticas citadas por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), que sitúan a Cuba entre las naciones de mayor desarrollo educativo a nivel mundial.

Más de 2,6 millones de niños y adolescentes cubanos figuran este año inscritos en la enseñanza primaria y secundaria, distribuidos en 13.343 centros de enseñanza en toda la Isla, donde "en los últimos 18 meses se construyeron 4.453 nuevas aulas", afirmó.

El régimen ha presentado el nuevo curso escolar como "una profunda e inédita revolución educacional" para la cual se construyeron o ampliaron más de 700 escuelas sólo en La Hababa. Unos 5.500 maestros se graduaron este año en la Isla para llegar a un índice "de 42,2 habitantes por docente".

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