AFP/ La Habana. El diario oficialista Juventud Rebelde descorrió este domingo el velo que habitualmente cubre el consumo de drogas en Cuba y reprodujo declaraciones de cinco padres cuyos hijos están atrapados por la drogadicción, un tema hasta ahora tabú en la Isla. No obstante, el artículo no ofrece dato alguno sobre el índice de drogadicción en la Isla o las características del consumo.

Bajo el título Historias Paralelas, el periódico publicó, sin revelar nombres, los testimonios de tres madres y dos padres cubanos que hablan del drama.

"Para mi la droga sólo existía en películas (...). Vivía obsesionada con que mi hijo no incurriera en errores (...) pero la droga sí que no podía imaginármela", dijo una profesional cubana de 57 años, cuyo hijo es tratado en el Hospital Psiquiátrico de La Habana.

La investigación realizada por el periódico, órgano de la Unión de Jóvenes Comunistas, deja entrever que las cuatro familias encuestadas tienen un nivel educacional alto y no clasifican en los sectores de menos ingresos.

"El (...) nos dijo que estaba enfermo de drogas y que debía dinero. Para nosotros era inexplicable que debiera 10.000 pesos (el salario promedio en Cuba ronda los 250 pesos mensuales). El asunto es que consumía crack", dijo un padre de 39 años, trabajador por cuenta propia.

Hasta este momento, las autoridades cubanas sólo han hecho referencias públicas muy genéricas a la drogadicción en el país y afirman que ésta no representa problema social alguno. La erradicación de la drogadicción se considera uno de los "logros de la revolución" en la Isla, situada en una de las principales vías del narcotráfico desde Suramérica a Estados Unidos.

"Si la droga no tuviera como punto de destino a Miami u otro lugar de la Florida ésta no arribaría a Cuba. Llegaría una pequeña cantidad que es la capturada en los aeropuertos y que tiene como destino a Europa", ha dicho el coronel Oliverio Montalvo, del Departamento Nacional Antidrogas (DNA).

Según las autoridades cubanas, los narcotraficantes suelen transportar la droga en aviones desde Suramérica hasta aguas internacionales al norte de la Isla donde la "bombardean" en paquetes que son recogidos por lanchas rápidas, para introducirla en el mercado norteamericano a través de Miami.

Algunos de esos paquetes recalan sistemáticamente en Cuba. "En 1995 se registraron 157 llegadas con 4.843 kilogramos de drogas capturados", afirmaron fuentes de la DNA.

No obstante, el cubano de a pie considera que el turismo internacional (principal fuente de ingresos del país) es otra vía de ingreso de la droga y señala a las discotecas como centros propicios para el consumo.

Hace varios meses la discoteca Comodoro de La Habana, una de las mas frecuentadas por los jóvenes de la capital cubana, fue transformada en restaurante vegetariano "porque se decía que ahí se vendía y se consumía coca", según algunos de los asiduos al lugar.

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