¿Rosa comunista? |
|
|
por LáZARO MORELL, Madrid |
|
Se trata sin dudas de una canción hermosa ésta del trovador Oscar Hernández. Acaso un poco masoquista ("...y dije enseguida:/ amor con herida / que dulce dolor..."), pero, ¿por qué no? También un poco enfática, pues eso de aclarar que la sangre es roja... Lo que no queda muy claro si hay un símbolo himenólatra que da vueltas alrededor del texto y, bueno, ¿nos permitirá el maestro dudar de aquello del "primer y único amor"? Los trovadores no han sido nunca ejemplos de castidad, digo yo.
Rosa roja (bolero, 1917) Oscar Hernández
En la triste mañana de un día invernal, una rosa roja yo vi en tu rosal. Yo quise ofrendarla en prueba de amor, y al ir a tocarla, la rosa me hincó, me hincó, y al ir a tocarla, la rosa me hincó.
Brotó de mis dedos la sangre rojiza, de un rojo tan vivo como el de la flor, y dije enseguida: amor con herida, qué dulce dolor. Así fue mi primer y único amor. Nació de una rosa perfume y espina, amor y dolor.
|