Un quinto que va de primero |
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Al frente del Toronto, Carlos Tosca es otro ejemplo del prestigio ganado por peloteros y oficiales cubanos en el béisbol de las Ligas Mayores. |
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por JORGE EBRO, Miami |
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Carlos Tosca se convirtió en el quinto cubano elegido para dirigir un equipo de Grandes Ligas, cuando los Azulejos despidieron a Buck Martínez y le pidieron al antillano, quien se desempeñaba hasta ese momento como coach de tercera base, que ocupara el puesto principal en el alto mando del Toronto.
De este modo, Tosca se une a Miguel Ángel González (Cardenales de San Luis), Preston Gómez (Padres de San Diego), Octavio Cookie Rojas (Angelinos de California) y Tany Pérez (Rojos de Cincinnati y Marlins de la Florida), quienes forman el quinteto de cubanos que han dirigido clubes de Ligas Mayores.
Ningún otro país latinoamericano ha tenido tantos manager como Cuba en la Gran Carpa, lo cual es un signo del prestigio que se han ganado tanto peloteros como oficiales de la Isla durante más de 100 años de béisbol de lujo en los Estados Unidos.
Antes de Tosca, el último cubano en ocupar tan alto cargo fue Atanasio Tany Pérez, quien asumió el mando de los Marlins luego que estos despidieran en mayo de 2001 a John Boles, un hombre al que calificaron como carente del liderazgo necesario para triunfar en un torneo tan exigente como el de las Mayores.
Como Pérez, Tosca dirigirá a los Azulejos tras el cese de Martínez, a quien le tocó la mala suerte de conducir a un equipo en su peor inicio de temporada en los últimos años. No hay que olvidar que Toronto ganó dos Series Mundiales consecutivas a principios de los 90, pero tras esos años dorados no ha vuelto a levantar cabeza.
A Martínez se le achacó también falta de liderazgo y de interés para provocar un cambio de mentalidad en el clubhouse de los Azulejos. Lo cierto es que nunca había dirigido un equipo de pelota en ninguno de los diferentes niveles del profesionalismo.
Por su parte, Tosca muestra una extensa hoja de servicios al haber sido piloto en 1759 juegos en Ligas Menores con equipos de las organizaciones de los Marlins, los Yankees de Nueva York y los Bravos de Atlanta. Además, durante tres años fue coach de banco de los actuales campeones, los Diamondbacks de Arizona.
Lo primero que hizo el cubano fue reunirse con el equipo y exigir mayor agresividad. Los Azulejos cuentan con buenos jugadores como el boricua Carlos Delgado y el prometedor novato Eric Hinske, pero aparentemente requieren de alguien que ponga en su lugar las complejas piezas del rompecabezas que es un conjunto de Grandes Ligas.
Toronto marcha de tercero en una división sumamente difícil, donde casi es indiscutida la prominencia de los Yankees y el empuje de los Medias Rojas de Boston. Aún así, podría realizar un mejor papel y brindar mayor calor a la lucha por el banderín.
Tosca ha prometido esto, aunque es el primero en reconocer que la tarea no es fácil. Por ahora, basta con el reconocimiento que presupone haber sido nombrado manager. Pase lo que pase, es el quinto de una honrosa lista que ya muchos países quisieran exhibir.
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