| Eusebio Leal y el libre tránsito desde y hacia Cuba |
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| por GILBERTO CALDERóN ROMO, México D. F. |
Parte 2 / 2 |
Aquí es donde la lógica del planteamiento de Leal Splengler se inserta en el futuro de Cuba. Para que lleguen diez millones de turistas norteamericanos —los únicos que pueden llenar los hoteles en esas proporciones— se requiere eliminar las restricciones del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, que impiden viajar a los ciudadanos yanquis a la Isla y gastar dólares en un país cuyo gobierno es considerado hostil al del imperio.
Es aquí donde entra el punto "Eusebiano", porque en la hipótesis de que el Tesoro gringo erradicara la prohibición y los ciudadanos estadounidenses pudieran viajar libremente a Cuba, los de origen cubano tendrían que poder hacerlo también. Ahora esto no es posible, porque para el Gobierno castrista siguen siendo nacionales de la Isla sometidos al requisito de obtener una visa para entrar al país. El enredo estriba en que la administración de Washington no puede admitir un trato discriminatorio para sus ciudadanos en el exterior y, si abre la puerta para que todos puedan viajar hacia la Isla, todos deben estar sometidos a los mismos requisitos migratorios.
Así pues, la apertura norteamericana debe ir acompañada de una modificación por parte de las autoridades migratorias cubanas, en el sentido de establecer la libertad de viajar desde y hacia la Isla. De otro modo, se abriría la posibilidad de iniciar reclamaciones ante tribunales federales norteamericanos o internacionales.
Si se eliminan las prohibiciones a los cubanos para ingresar en el país o se les otorga el beneficio de la doble nacionalidad, entonces una ecuación como la planteada por Eusebio Leal, de entrar y salir libremente de la Isla, no solamente tiene un perfil humanitario elemental, sino que también propiciaría que se pudiera ayudar a eliminar el bloqueo para el tránsito de personas provenientes de los Estados Unidos y de otras naciones.
He aquí un planteamiento inteligente y con hondas repercusiones en el humanismo y en el futuro del país. Eusebio Leal no solamente es un restaurador arquitectónico y urbano, un buen administrador y un literato de alto vuelos. Es, aquí queda acreditado, un político con ideas valiosas que tienen que ver con lo que puede suceder en el futuro.
La apuesta por el libre tránsito de los cubanos de y hacia la Isla, es de un valor inestimable no solamente para reforzarle simpatías al régimen o para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, sino, también, un prerrequisito y una señal de buena voluntad para ir abatiendo los embargos y bloqueos que se le atribuyen en forma exclusiva a la otra parte, pero en los que el Gobierno de Fidel Castro también tiene que ver.
Felizmente, la inteligencia cubana es mucho más que el "Hassanismo", y tiene mucho que aportar para mejorar el mundo en que vivimos.
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