AFP/ La Habana. El Programa cubano de Reforestación de las Riberas del Río Cauto está entre los nominados por Naciones Unidas para recibir uno de los premios que otorgará el jurado especializado de la Cumbre para el Desarrollo Sostenible, en curso en Sudáfrica.

Son 27 los proyectos de todo el planeta que optan por este reconocimiento. El jurado entregará seis premios en el marco de la Iniciativa Ecuatorial, lanzada por el Proyecto de Desarrollo Local del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el gobierno de Canadá, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Desarrollo, la Unión Mundial para la Protección Ambiental y la Fundación de las Naciones Unidas.

El programa de reforestación cubano se inició en 1998, promovido por el gobierno provincial de Granma y el PNUD, y apoyado por las regiones italianas de Liguria, Cerdeña y Foligno. Hasta el momento se han plantado cinco millones de árboles, según Alberto D. Pérez, responsable de información del PNUD en La Habana.

Para la ejecución del programa, las márgenes del río se dividieron en lotes y se crearon las llamadas "fincas forestales". Los responsables de estas fincas han recibido gratuitamente una vivienda amueblada en la zona, útiles y ropa de trabajo, calzado, otros insumos y asistencia técnica y metodológica, así como posturas, fertilizantes y ayuda con el transporte.

Incialmente la reforestación privilegió especies de crecimiento rápido, y otras con valor energético, pero actualmente, dependiendo de la topografía del terreno, se siembran selectivamente plantas de maderas preciosas, frutales y especies autóctonas.

El río Cauto es el más largo de Cuba, tiene unos 343 kilómetros, y ha experimentado un importante deterioro en las últimas décadas. Además de la deforestación de sus riberas, el Cauto sufre una fuerte contaminación de sus aguas. Son 652 los focos que trasladan sus desechos al río desde las provincias Santiago de Cuba, Holguín y Las Tunas.

Desde la desembocadura del río, 62 kilómetros hacia dentro, las aguas están salinizadas. Algunos poblados de la zona sólo reciben agua potable mediante una patana, a pesar de estar ubicados a la orilla de la mayor corriente de agua dulce del país. En su curso final el río corre al revés; esto es consecuencia del gasto natural que debe ser de cinco metros cúbicos por segundo, pero dado el represamiento, es sólo de dos.

Desde mediados de la década del sesenta el curso inferior de la cuenca del río Cauto sirvió de polígono de pruebas a los planes para el desarrollo agrícola del país. El desbroce mecanizado de extensas zonas boscosas, que fueron sustituidas por pastizales y cultivos de arroz, así como la construcción de extensos sistemas de riego, unidos a la ubicación de embalses en la cuenca, como el de Cauto-El Paso, son reconocidos entre las principales causas de la actual situación.

La tala incontrolada del bosque de galería, ubicado en las márgenes, fue otro proceso negativo, acentuado en el Período Especial debido a la falta de combustible doméstico. Esto se unió al libre pastoreo de reses y al asentamiento de aparceros en la zona.

Imprimir Enviar