AFP/ Lima. El ministro de Justicia, Roberto Díaz, afirmó ayer en Lima que La Habana rechaza terminantemente el terrorismo y que el régimen "procedió sin demora" a firmar acuerdos internacionales de las Naciones Unidas para combatir ese delito.

"Cuba ha declarado con reiteración que rechaza terminantemente el terrorismo, que repudia enfáticamente los actos terroristas, incluyendo por supuesto los hechos del 11 de septiembre", anotó al referirse a los atentados del año pasado en Estados Unidos.

Díaz añadió que la línea del régimen de Fidel Castro "es muy clara, firme y concluyente" en ese tema.

"Este rechazo y repudio lo manifestó mi país desde el primer momento y lo ha repetido con justificada y razonable insistencia; tan pronto se conoció el ataque terrorista (del 11 de septiembre), Cuba ofreció sus instalaciones aeroportuarias para que pudieran ser usadas por naves con destino a aeropuertos de Estados Unidos", dijo.

Al intervenir en la XIII Conferencia de Ministros de Justicia de Países Iberoamericanos, inaugurada ayer en Lima, el ministro dijo que La Habana "procedió sin demora a la firma de dos instrumentos internacionales que en el marco de las Naciones Unidas se habían acordado en relación con el terrorismo, con actos terroristas y con la lucha universal y mancomunada contra el terrorismo".

Hizo notar que en diciembre del año pasado el régimen cubano acordó una ley contra actos terroristas, que prevé severas sanciones en consonancia con las precisiones incluidas en los instrumentos internacionales.

Díaz dijo que tenía especial interés en que los ministros que asisten a la conferencia sepan que La Habana ha propuesto a Estados Unidos la firma de tres acuerdos bilaterales de cooperación, lucha contra el terrorismo, lucha contra el narcotráfico y la drogadicción y lucha contra el ilícito e inhumano tráfico de personas.

"Estas propuestas siguen en pie y ellas se adicionarían a los ya vigentes acuerdos migratorios entre ambos Estados", precisó.

Advirtió que con la misma claridad y reiteración con que el régimen rechaza el terrorismo, también ha repudiado la guerra como fórmula totalmente injusta, arbitraria y cruel.

"El terrorismo y la guerra constituyen en nuestra opinión métodos que por su similitud se identifican en su indeseable resultado, porque ambos se basan en la violencia, la injusticia y la destrucción", remarcó.

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