| Salas de quemados cubanas carecen de condiciones |
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| por BEATRIZ DEL CARMEN PEDROSO, La Habana |
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Existen veinte unidades asistenciales de quemados distribuidas en toda la Isla, las cuales no reúnen las mejores condiciones para la atención a los pacientes. "Los recursos de las salas de quemados son escasos. Medicamentos para combatir la anemia, el rojo escarlata, la sulfadiazina de plata, las cremas de factor de crecimiento epidérmico y una dieta hiperproteica para el paciente, conforman una lista de medios que no tenemos a nuestro alcance", dijo un enfermero intensivista de la sala de quemados del Hospital Lenin de la provincia de Holguín.
"Alrededor de 700 pacientes se atienden en este hospital, la mayoría de las veces por accidentes domésticos graves, con o sin posibilidades de salvación, provocados en casi todos los casos por el mal manejo de sustancias químicas o electricidad, cocinan con ellas sin protección alguna debido al grado de pobreza en que viven", agregó. Según las autoridades sanitarias de este territorio, antes de 1990 los fallecimientos por suicidios —quemaduras— tenían una mayor incidencia que en la actualidad.
"El gasto por cada paciente quemado asciende a 130 pesos diarios, sin contar la hospitalización y el equipo multidisciplinarlo que los atiende y los injertos con piel de cerdo. La necrosis quística aguda es una de las complicaciones más comunes de este padecimiento, por eso las fisioterapias y presoterapias deben ser aplicadas antes del año, de lo contrario no habrá remedio", concluyó el enfermero intensivista.
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