| En tiempo fuerte |
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| 'Lo que quiero es que me entiendan', asegura Boris Larramendi tras el lanzamiento de su primer disco en solitario. |
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| por DENNYS MATOS, Madrid |
Parte 1 / 2 |
Ya está a la venta en España, escuchándose en diferentes emisoras de radio, el tema Yo no tengo la culpa, que encabeza el primer disco de Boris Larramendi. Luego de sus contratiempos para hacerse con una discográfica, finalmente Zomba Records —bajo la producción musical de Alejo Stivel— decidió apostar por el proyecto del cubano. El CD, a pesar de su variedad sonora, se decanta por el pop de contenido latino. El punk y el rock también se abren paso en un disco que recrea, claro está, el inconfundible sonido de Habana Abierta.
¿Este primer disco en solitario es continuidad o ruptura con tu trabajo anterior en Habana Abierta?
No creo que yo haya salido de Habana Abierta, creo que de Habana Abierta no se sale. Habana Abierta ahora mismo es un concepto, una historia, algo que nos involucró. Hay dos discos, y ese hecho da la medida de que en un momento determinado funcionamos como grupo, aunque fuera por circunstancias coyunturales, económicas. Habana Abierta es una historia que viene de la Peña 13 y 8, donde nos reuníamos un grupo de amigos que hacíamos cosas afines en espíritu y sensibilidad. Por eso, para mí, el disco es más una continuidad de lo que intentaba hacer hace diez años. O sea, una mezcla de cosas rítmicas de la música cubana con elementos del rock y del pop.
¿El pop adquiere ahora más peso que en tus trabajos anteriores?
Creo que no me he separado mucho de lo que hacía antes. Tengo una pila de maquetas que hablan un poco de eso. Antes, quizás, la sonoridad era más punkie, más descuidada o tal vez yo cantaba peor. Pero no era tanto intención como falta de medios. O sea, cuando tienes pocos medios y estás apurado, es mejor que te salga algo agresivo y punkie a que trates de hacerlo muy lírico y te quede ridículo.
¿El disco suena más pop porque hay mayor presencia de ritmos latinos de actualidad?
La diferencia viene dada porque, por ejemplo, la voz está más cuidada y es cierto que todo está hecho más pop. En cuanto a los ritmos creo que sí, aquí en España me he abierto a otras músicas. En Cuba generalmente usaba ritmos casi exclusivamente nuestros, mezclados con el rock. Pero bueno, estábamos en Cuba y era un poco una bandera para diferenciarme. Era ir a los ritmos más autóctonos, la rumba, la conga, etcétera, pero una vez aquí creo que sería demasiado localista permanecer cerrado. Además, no son los únicos ritmos que me gustan, la madre de todos estos ritmos es África. Entonces, en España he escuchado mucha música africana, he visto como funciona, he visto como se puede imbricar con la música cubana. También he escuchado más música brasileña, y hay una raíz común, que es la raíz yoruba. Sobre todo en los elementos que yo uso en este disco, como la batucada, porque trabajando sólo con ritmos cubanos era una manera de cerrarme a una nueva sensibilidad.
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