| El juego está trancado |
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| ¡Ni un paso atrás!, clama la oposición a Chávez tras 37 días de paro. Los cacerolazos suplantaron a los villancicos en la Navidad venezolana. |
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| por YAMILA RODRíGUEZ EDUARTE, Caracas |
Parte 1 / 3 |
Nadie que viva en Venezuela va a olvidar los últimos días de 2002. Por primera vez en la historia de este pueblo la Navidad no llegó a la mayoría de los hogares venezolanos. Las manifestaciones en las calles sustituyeron a las veladas familiares y los "cacerolazos" a los villancicos. Ni la llegada del nuevo año enfrió el espíritu de la pujante oposición, que exige la renuncia de Hugo Chávez o la convocatoria a elecciones anticipadas. "Feliz libertad y próspero gobierno nuevo" fue el saludo intercambiado por los opositores al chavismo.
Que la mayoría de los venezolanos haya renunciado a las fiestas de fin de año dice mucho del compromiso asumido desde el 2 de diciembre pasado, cuando comenzó el paro cívico nacional. Precisamente por coincidir éste con las festividades el Gobierno imaginó que iba a fracasar. Pero se equivocó, porque se empeña en no contar a sus adversarios, a esos que llama "escuálidos".
Es difícil reconocer a Venezuela luego de cinco semanas de huelga general. Gran parte del sector comercial y la casi totalidad del industrial sigue en paro. En Caracas, al igual que en las ciudades del interior, la mayoría de las estaciones de gasolina están cerradas. En las pocas que están prestando servicio se forman interminables colas de vehículos. La paralización de la industria petrolera ha provocado una escasez de gasolina como nunca se había visto. La circulación de autos ha disminuido notablemente, y lo mismo sucede con los taxis y el transporte público.
| El gobierno de Chávez anuncia una reestructuración de Petróleos de Venezuela |
El gobierno venezolano anunció el martes una reestructuración de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) descentralizando el poder que actualmente detenta su cuartel general en Caracas, informó la agencia Reuters.
"Vamos a crear dos operadoras, dos grandes operadoras, una ubicada en el occidente del país y otra ubicada en el oriente", dijo a una cadena de radio y televisión el ministro de Energía y Minas, Rafael Ramírez.
La nueva estructura de PDVSA estaría dirigida a terminar con la huelga petrolera, principal elemento de la ofensiva opositora contra Chávez, a la que se han unido miles ejecutivos, gerentes y empleados administrativos de la oficina central en la capital.
La reestructuración incluirá el despido de cerca de 6000 empleados, según fuentes oficiales citadas por el diario español El País. PDVSA tiene una plantilla de 40.000 trabajadores fijos. La oposición a Chávez asegura que de ellos unos 30.000 participan en la huelga.
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La gente acostumbrada al lujo de que un litro de gasolina cueste más barato que uno de agua embotellada ve con asombro el florecimiento de un mercado negro de combustible. En la actualidad un litro de gasolina puede ser revendido hasta en 1000 bolívares (0,68 dólares), cuando su precio original era de 70 (0,07). Lo mismo sucede con los balones de gas licuado, que han triplicado su precio a manos de los contrabandistas.
El desabastecimiento de algunos productos alimenticios se ha acentuado, sobre todo en las poblaciones del interior del país. Los supermercados abren en horario restringido, de nueve de la mañana a una de la tarde, lo que provoca grandes colas. De acuerdo con Rafael Rosales, ministro de Industria y Comercio, en el Gobierno "no hay mayor preocupación por el desabastecimiento de productos". A pesar de que dirigentes oficialistas han reconocido que debido a la paralización de la agroindustria faltan algunos productos como leche pasteurizada, harina de maíz, azúcar, arroz, atún, sardina en lata, refresco y cerveza.
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