El arte de la tergiversación |
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Caso Chávez: De cómo el Órgano Oficial del Partido Comunista de Cuba ve una cosa y describe otra. |
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por MIGUEL RIVERO, Lisboa |
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Es de sobra conocido que el diario Granma pasará a la historia como uno de los medios de comunicación social que mejor cultiva el arte de la tergiversación (intencionalidad política, le llama el Departamento de Orientación Revolucionaria del Partido Comunista de Cuba).
Esto se puso en evidencia el pasado 6 de marzo, cuando ese rotativo reflejó la información acerca de las "Bases para un acuerdo democrático", documento clave de la sociedad civil venezolana en la batalla contra el régimen totalitario que trata de implementar en ese país suramericano el presidente Hugo Chávez.
Este acuerdo fue firmado por la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), la organización que aglutina a los empresarios del país (Fedecámaras), y contó con la bendición de la Conferencia Episcopal Venezolana.
Para el Órgano Oficial del Partido Comunista de Cuba fue el "Pacto de la derecha contra proceso bolivariano", según un titular del 6 de marzo.
Para la prensa venezolana: "Acuerdo para una salida pacífica". Si las divergencias se limitasen a los titulares, hasta se podría comprender.
La gran tergiversación de Granma es cuando señala que "entre los puntos principales, el pacto de la derecha llama a estrechar más las relaciones con Estados Unidos y rechaza la participación de las fuerzas armadas en planes sociales".
Para el diario El Nacional, el más influyente de Venezuela, "la necesidad de superar la pobreza fue el punto principal de las diez proposiciones contenidas en el documento".
Una lectura minuciosa del texto del acuerdo no justifica la afirmación del diario cubano en lo que se refiere a "estrechar más las relaciones con Estados Unidos".
El documento señala claramente que "resulta vital la recuperación de la imagen y la confianza internacional de Venezuela. Asimismo, se hace necesaria afianzar los vínculos con sus socios económicos y diseñar una estrategia de relaciones internacionales que garantice una inserción exitosa y moderna del país en el contexto latinoamericano y mundial".
Evidentemente, como Estados Unidos es el principal socio comercial de Venezuela, Granma centraliza en ese país, intencionalmente, los propósitos de los firmantes, con el claro objetivo de colgarles después la etiqueta de "marionetas" de Washington. Pero el documento es claro y se refiere a los "socios económicos" de Venezuela, o sea, los abarca a todos. Si en algo se pone énfasis es en el aspecto latinoamericano, lo que tampoco debe gustar mucho al diario cubano pues indica hacia el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
En lo que se refiere a las Fuerzas Armadas Nacionales (FAN) de Venezuela, el documento aboga por "la adopción de un marco institucional que garantice la subordinación de la fuerza militar y la policía al poder civil".
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