Viernes, 24 enero 2003 Año IV. Edición 541 IMAGENES PORTADA
ECOLOGÍA
ARQUITECTURA
HUMOR
varela
CONVOCATORIA
Prensa
Revista
Revista Encuentro
Envia...
Suscríbete...
Humor
Carta a San Lázaro

por RAMóN FERNáNDEZ LARREA, Barcelona Parte 3 / 3

Por supuestísimo que uno de los Lázaros (no olviden lo de los lázaros afectíveros) es aquel del cuento, el hermano de María y de Marta, por más señas, amigo de Jesús en Betania (no confundir con Gran Betania, que allí protestaron mucho por eso), y un día se puso papucho, y colgó el tennis. Pero "en eso llegó Jesússsss, manejando un cuatrimotorrrrrrr... ¿y saben lo que pasó? Fui fui... ¿y saben lo que pasó? Fui fuiiii...". Pues que, sin usar interferón ni nada, lo animó con sus palabras, lo enardeció con su labia, lo alentó en el desaliento, y Lázaro, allí, en lo profundo del jardín central, levantó su mascotín y capturó la bola. Es decir, se irguió yerguido, soltó el mal aliento y revivió. Afirman que las palabras que Jesús le soltó al amigo no fueron abracadabra ni ábrete, sésamo, ni "convertiremos el revés en victoria", sino: "Lázaro, levántate y anda". Pero ningún apóstol sabe explicar en qué dirección. Ha de ser por eso que las Pseudo-Clementinas cuentan que él acompañó a San Pedro a Siria, muy serio, no sé para qué sería. Mas, la tradición más mentada en el oriente (Contantinopla, no Contramaetre) es que los judíos (siempre judiendo) embarcaron a Lázaro en Jaffa en una nave que hacía agua (¿destilada, oxigenada, mineral?) por los ocho costados (era una nave antigua) y así y todo, milagrosamente, a pesar de los pesares, cruzó el estrecho de la Florida... no, perdón, y llegó a Chipre (¿vendrá de ahí lo de ofrendarte un chipro barbudo?). Allí, en Chipre (no confundir con el Chipre de Allendre) fue elegido (¿por unanimiedad?) obispo de Kitión, Lárnaca, de ahí eso del morado manto de Lepanto (aunque no me lo explico, Lepanto quedaba lejos. Quizá también usara un gorro frígido), y sólo se kitión el manto obispal 30 años más tarde, cuando le dio verdaderamente la patada a la lata, y no lo volvió a llamar nadie para que siguiera andando. Es posible que se hubiera quedado sordo. O sardo, que por esas islas todo se parece.

Resumamos: A ese Lázaro se le construyó una iglesia y un monasterio en su honor, allá por el año 890 en Constantinopla. Y se corrió la bola de que había sido también obispo de Provenza, y había muerto mártir en Francia, lo que le otorga una ubicuidad tremenda, y tiene reliquias por todas partes. Pero, poronpompero, a la gente más o menos indecente, es decir, a nosotros que somos mayoría, nos importa más el otro Lázaro, el de la parábola, uno ahí muy pobre que se sentaba en la puerta del rico, lleno de llagas, esperando a ver qué se le pegaba. Y lo único que se le pegaba eran los perros. De ahí salió la leyenda del "Hombre del saco" para que los niños de la casa rica se comieran toda la papita, bajo la amenaza de: "O te lo comes todo o te saco pa' fuera y terminarás como ese hombre". Lázaro es una forma griega del nombre hebreo Eleazar, que significa: "Dios es mi ayuda". Y ahora que lo pienso, hay que ver lo extensa que es la colonia griega en Centro Habana, Guanabacoa, La Lisa y Palocagao.

Esa es la imagen que se venérea, que se venera más bien, el Lázaro que es una forma yoruba de pronunciar Babalú Ayé. Es muy curioso todo esto, porque otra bola dice que el Lázaro de la resurrección tuvo que abandonar el país —miren esto— y llegó a Francia, donde sí fue obispo de Marsella. Lo hicieron prisionero y lo ejecutaron marsillando su nombre. Si vemos este detallito de que Lázaro "se tuvo que ir del país", y lo mezclamos con que el poder eclesiástico no acepta en el santuario de El Rincón a los dos, y el rico está adentro pero la gente acude más al que está afuera, en nuestro cerebrito se cerebra una idea muuuuu, pero muuuuu peligrosa. ¿Algo que ver con las remesas? No sé por qué tengo esta desmedida tendencia a desenfocar las cosas. Mírenlo ustedes como sugiero, y otro 17 de diciembre me dicen su conclusión.

Lo simpático y sincrético es que Babalú era un mozalbete yoruba, atractivo y parrandero, marido de Ochún. Algunos chismosos le consideran hijo de Naná Burukú, pero otros enterados dan por sentado que nació directamente de Obatalá. Se supone que, contra la advertencia de Orula se fue a quimbar (que es una forma muy yoruba de hacer el amor fuera del matrimonio) y amaneció lleno de llagas (ahora cualquier médico de la familia aseguraría que agarró una sirigaña muy disífilis de curar) y murió. Pero Orula, conmovido allá en su seno, estudió la apelación de Ochún y lo resucitó. No le dijo: "Levántate y anda", porque eso ya tenía copyright, pero algo le cantó en lengua, tal vez: "Great Babalú/ I´m so lost and forsaken./ Ah, great Babalú/ Bring back the love you´ve taken..." y así, subvesivamente.

Por todo ese batido mental, ya la gente no sabe bien a quién le ofrenda para que no se sienta ofrendido. Eres un oricha mayor y santo muy venerado, en lo venéreo y en lo llaguístico. Una deidad de la viruela (lindo instrumento musical), la lepra, y, en general, de las afecciones de la piel, como el rubor, la sarna, la rasquiña, las ñáñaras y todo lo que a uno le da asquito. Tus atributos son el ajá, que es un manojo de varetas de palma de corojo o de coco, atadas en su extremo inferior con una tela de saco. De ahí la interjección "ajáaaa" para decir carajo o corojo. Lo que no entiendo muy bien es que se explica que tu imagen ha de acompañarse con, y cito textualmente tus atributos: "igualmente perro, de cualquier tipo de material, que sean blancos y con manchas amarillas". En esa amplia jugada entran lo mismo el rotweiler, el pastor alemán o protestante, el perro sin tripas, el del hortelano o los 101 dálmatas.

Dada tu capacidad para proteger contra todo tipo de aflicciones cutáneas —y con la falta de jabón actual hay muchos afliccionados a ese deporte—, sífilis, lepra, viruela (sigue siendo un instrumento hermoso de varias cuerdas), cólera, problemas con la suegra, problemas gástricos y cástricos, gangrenas, embolias, erisipelas (bello nombre de mujer), amputaciones y pústulas, lo normal es que te ubicaran laboralmente en un leprosorio. A uno le empiezan a salir ronchas y postillas y le entra una lepresión y un estado lepresivo muy grande. Y como en la Isla no se pustula cualquiera, pues te salen pústulas (ahora se les confunde con jineteras, de ahí ese canto infantil que dice: "Pústula qué estás haciendo/ tanto rato en la cocina?").

No quería cerrar esta trova sin hacer un resumen de la actividad con un leprocinio de mi cosecha. Tu currículo dice también que tus mensajeros como deidad son las moscas, los mosquitos y todos los insectos vectores de enfermedades. Tal vez por eso tu día, el 17 de diciembre, sea una importante enfermérides para el cubano. Y si el bicho da al pecho ahora por culpa del enemigo, pudiéramos decir que "en el pueblo hay muchos Lázaros", o lo que es más estimulante: "Lázaro es el pueblo uniformado". No me extraña entonces el miedo que te tienen los que mandan, con lo muleta que anda la cosa.

Hasta los vectores siempre, en la otra oricha

Ramón

Salto a cont. Volver: Inicio »
1   Inicio
2   Aparecen algunas...
3   Por supuestísimo...

Imprimir Imprimir Enviar Enviar

En esta sección

Qué falta hace un elefante
JOSé HUGO FERNáNDEZ, La Habana
Carta a Arsenio Rodríguez
RAMóN FERNáNDEZ LARREA, Barcelona
Noticias relevantes (julio-diciembre 2002)
ENRISCO, New Jersey
Carta a Jack el Destripador
RAMóN FERNáNDEZ LARREA, Barcelona
Carta a José de la Caridad Méndez
RFL, Barcelona
Noticias relevantes (enero-junio 2002)
ENRISCO, Nueva Jersey
Más allá de 'La Tremenda Corte'
GILBERTO CALDERóN ROMO, México D. F.
 
 
PORTADA ACTUAL NOSOTROS CONTACTO DERECHOS SUBIR
 
© 1996-2003 Asoc. Encuentro de la Cultura Cubana.