Viernes, 19 julio 2002 Año III. Edición 413 IMAGENES PORTADA
ECOLOGÍA
ARQUITECTURA
HUMOR
varela
CONVOCATORIA
Prensa
Revista
Revista Encuentro
Envia...
Portada
Suscríbete...
Humor
De Anaximandro a Scheler

El modelo político cubano, ¿intangible o intocable? A propósito de la nueva definición hecha pública por el periódico 'Granma'.
por DIMAS CASTELLANOS, La Habana  
Anaximandro
Anaximandro de Mileto

El jueves 20 de junio, la primera plana del periódico Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba, anunció el acto que se celebraría en la tarde del mismo día en la Plaza de la Revolución para hacer entrega a la Presidencia de la Asamblea Nacional del Poder Popular de las firmas que suscribieron el proyecto de modificación de la Constitución en el cual se establece el principio de que el socialismo es "intangible". Días antes, cuando se reunieron las "organizaciones de masas" que "solicitaron" la reforma constitucional, se había planteado, para sorpresa de casi todos, que el socialismo era intocable. Definición que admitía un abanico tan amplio de interpretaciones que los propios autores del término decidieron, casi inmediatamente, permutarlo por otro más "definible". Ahora el socialismo no sería intocable —se podría tocar—, pero sí intangible.

A partir del instante en que Granma comenzó a circular se sucedieron las interrogantes acerca de la enigmática "intangibilidad" del socialismo. Acudiendo a diccionarios y enciclopedias, se pudo conocer que el adjetivo "tangible" significa "que se puede tocar", que se puede percibir de manera precisa, por tanto in-tangible se refiere a lo contrario, a lo "intocable". La búsqueda reveló que se trata de un simple cambio que en nada altera el sentido original, es decir, la "intocabilidad" del socialismo. Otra de las fuentes consultadas establece que los términos "intocable" e "intangible" pueden sustituirse entre sí, pero el primero se prefiere para las cosas materiales y el segundo para lo figurado. Desde este punto de vista, pudiera dársele alguna razón a quienes eligieron la palabra: el socialismo cubano es intangible en tanto figurado.

El filósofo, matemático y astrónomo griego Anaximandro planteaba que el primer principio a partir del cual surgen todas las cosas es una sustancia intangible, invisible e infinita. Parece bastante acertado con la salvedad de que del socialismo intangible cubano han surgido muchas cosas, incluyendo la crisis económica, la libreta de abastecimiento —que vino para quedarse—, la insuficiencia de los salarios y últimamente el sorprendente aumento de precios. Mientras, el filósofo alemán Max Scheler logró distinguir las esencias de lo intangible, lo que le llevó a la afirmación de la independencia de los valores eternos e inmortales. Aplicado a nuestro caso particular, podría entenderse en el sentido de que el carácter intangible del socialismo, como valor eterno e inmortal, es independiente de la realidad tangible en la que sume a quienes lo experimentan.

Un diccionario de economía afirma que la propiedad individual se puede subdividir en propiedad tangible e intangible. La propiedad tangible es aquella que tiene una existencia física, mientras la intangible no tiene esa existencia pero, sin embargo, sí puede ser poseída legalmente. Si se incorpora esta aceptación a nuestro propósito entonces el socialismo cubano no tiene existencia física, pero puede ser poseído. Sólo habría que aclarar quién es el poseedor, lo que trae a colación la frase del programa televisivo Pateando la lata: "¡Que nadie toque nada, yo sólo puedo tocar!"

Los fotogramas del estadounidense White, que se dedicó a estudiar aspectos de la Iglesia Católica, el budismo Zen y el misticismo, comenzaron luego a reflejar temas espirituales. White creía que enfocar y tomar una fotografía eran actos espirituales e intelectuales, y aseguró que una imagen es capaz de expresar valores intangibles, que lo que produce al que la mira resulta tan importante como lo que el artista tiene en mente. Ojalá sea éste el sentido del socialismo intangible cubano: las desesperadas elucubraciones que tiene en mente la nación, acerca de cómo mejorar su estado, podrían realizarse mediante la intangibilidad. De cualquier manera y dicho sea de paso, también se emplea el concepto referido a los fondos de comercio con sus activos intangibles, a los servicios y a las propiedades como las patentes y los copyrights.

El modelo de socialismo cubano podrá definirse intangible, pero seguramente su agotamiento definitivo lo vuelve palpable. Aunque las condiciones políticas, informativas y de control de la ciudadanía le permitan al régimen declararse intocable, para los cubanos de a pie lo importante e inmediato es sobrevivir, y eso cada uno sabe hacerlo de manera muy tangible.


Imprimir Imprimir Enviar Enviar

En esta sección

Héroes
ENRISCO, New Jersey
Carta a Felipe Blanco
RAMóN FERNáNDEZ LARREA, Barcelona
Preocupaciones
ENRISCO, New Jersey
Carta a los vasos de perga
RAMóN FERNáNDEZ LARREA, Barcelona
Más fuertes que nunca
ENRISCO, New Jersey
Carta a Herberto George Wells
RAMóN FERNáNDEZ LARREA, Barcelona
 
 
PORTADA ACTUAL NOSOTROS CONTACTO DERECHOS SUBIR
 
© 1996-2003 Asoc. Encuentro de la Cultura Cubana.