Lunes, 17 junio 2002 Año III. Edición 389 IMAGENES PORTADA
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La Habana: En tres y dos

por TANIA QUINTERO  
Comercios
Subida de precios. ¿Antesala de otro verano nefasto?

El ministerio de economía y planificación ya ha hecho pública la "modificación de precios de productos en las tiendas de divisas". Los cubanos —con un olfato especial— comenzaron a "rodar la bola" sobre el aumento de precios apenas una semana antes de que se hiciera efectivo.

Extraoficialmente, la fecha era el sábado primero de junio y finalmente la hora cero quedó marcada para el lunes 3 de junio. Entretanto, circularon copias y fotocopias de los listados de mercancías cuyos precios serían modificados.

El run run cobró fuerza el miércoles 29 de mayo. Ese día los dólares circularon por cientos de miles en todo el país. La gente literalmente invadió las shopping. Paralelamente, comenzó a especularse que las CADECAS alterarían las actuales cifras de cambio, estacionadas desde hace meses en 26 pesos por un dólar.

Históricamente la economía interna ha funcionado en base a rumores. Siempre que se ha alterado la distribución de alimentos o de moneda el rumor ha jugado un rol fundamental. No fue distinto en esta ocasión. Como la desinformación es madre de la exageración, noticias alarmistas corrían de boca en boca, llegándose a afirmar que "se aumentaría el doble o el triple" los precios actuales en dólares y que no quedaría renglón exento de modificaciones.

La gente se llevaba las manos a la cabeza y en voz alta comentaba que estaba acorralada "como en Argentina", con la diferencia de que no podía protestar "como los argentinos". El preludio al batacazo monetario fue una información del Instituto Cubano de Radio y Televisión, que anunció la transmisión de 59 de los 64 partidos del Mundial de Fútbol, de los cuales 45 se transmitirían en vivo y 14 de forma diferida. El fútbol, se aseguró, no opacaría la difusión de los play-offs beisboleros, ni de la Copa Mundial de Boxeo.

Con su chispa habitual, el cubano de a pie comparó su situación con la de la selección francesa, inesperadamente derrotada por los senegaleses.

Los amantes del béisbol adecuaron su léxico a las nuevas circunstancias: "Nos han puesto en tres y dos... ahora se robará más para sobrevivir". Y los seguidores del boxeo argumentaron que los aumentos en vigor el 3 de junio eran un nocaut que el Gobierno les había propinado sin pretensiones de anunciar un próximo aumento de salarios y jubilaciones. Algo nada deportivo.


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