Miami, capital del libro |
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por WILFREDO CANCIO ISLA |
Parte 1 / 3 |
Como es ya costumbre en noviembre, Miami vuelve a entronizarse como capital internacional del libro.
Desde el domingo y hasta el 18 de noviembre, la XVIII Feria Internacional del Libro de Miami acogerá en las instalaciones del Miami-Dade Community College (MDCC) un variado programa de lanzamientos, exposiciones, conversatorios con autores, coloquios literarios y actividades de animación cultural para los más diversos gustos.
La noche de apertura será esta vez por todo lo alto: un encuentro con el Premio Nobel de Literatura 2001, el trinitario de origen hindú Vidiadhar S. Naipaul, un narrador imprescindible para entender los conflictos del exilio contemporáneo.
Para la literatura cubana, constituirá también una ocasión memorable. Veintiocho autores cubanos y cubanoamericanos, residentes en Estados Unidos y otros confines de la diáspora, presentarán aquí sus libros más recientes durante un programa titulado "Cuba: la otra orilla".
La participación cubana demuestra la pujanza de la creación literaria fuera de la Isla, escrita desde múltiples latitudes, diversa en géneros y estilos, pero indiscutiblemente vital. Será esta la mayor presencia de autores cubanos en la historia de la feria, que en 1998 había organizado un programa similar con 17 de nuestros escritores.
Creada en 1984 bajo los auspicios del MDCC —el colegio universitario mayor de la nación—, la feria fue creciendo en magnitud y trascendencia hasta convertirse en el evento de su tipo más importante entre los que se celebran el Estados Unidos. El novelista Tom Wolfe, que la ha visitado en varias oportunidades, ha llegado a referirse al certamen como "la Meca literaria del mundo occidental".
Lo cierto es que los días de la Feria transforman la ciudad en un epicentro cultural, con una participación popular que alcanza como promedio los 500 mil asistentes. Las imágenes de largas filas para entrar a una sala de conferencias u obtener un autógrafo de los autores participantes, se repiten en diversos puntos, desde la mañana a la medianoche.
Más de 250 autores y unas 300 casas editoriales, librerías y distribuidoras nacionales e internacionales participan este año. Una verdadera fiesta literaria universal, que habla de un Miami culturalmente maduro y capaz de ofrecer al visitante algo más que sol, palmeras y diversión fácil.
El fin de semana de clausura, la feria se "desborda" en la calle. Decenas de quioscos al aire libre ocupan el área del downtown miamense, en el mismo centro de la ciudad, donde se pueden encontrar desde un rincón de libros viejos e incunables y una callejuela de atracciones infantiles, hasta demostraciones de cocina y jardinería, y sesiones promocionales de salud holística y espiritual.
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